EL AUMENTO DEL TURISMO DE PROXIMIDAD PERMITE A 'CBVH' SUPERAR UNA TEMPORADA DE VERANO ATÍPICA

Vall-llobrega, 10 de septiembre de 2020.- Este 2020 será recordado por ser el año de la pandemia que ha marcado nuestras vidas y todos los ámbitos de la sociedad a nivel global. Y en caso de que nos ocupa, es evidente que la aplicación de las medidas restrictivas para combatir la COVID-19 ha obligado a los sectores del turismo y la hostelería a adaptarse ante esta nueva situación.

Si bien es cierto que la temporada de verano no ha sido buena después de prácticamente tres meses de primavera sin actividad, los datos promedio de ocupación de los establecimientos que forman parte de Costa Brava Verd Hotels -incluye las marcas Costa Brava Hotels y Blau Verd Hotels- indican que el descenso ha sido menor del previsto a inicios de la pandemia, sobre todo gracias al aumento más que destaca.

Los esfuerzos de los hoteles a la hora de adaptarse al momento y la variada propuesta turística y de calidad del territorio han permitido salvar la situación durante los meses de julio y agosto.

Evolución de la temporada

La temporada de verano arrancó con gran incertidumbre y, de hecho, la mayoría de aperturas no se produjeron hasta mediados de junio. Con estos condicionantes, los niveles de ocupación del mes de junio respecto al año pasado bajaron considerablemente. Si nos fijamos en Costa Brava Hotels, el descenso fue del 27,40% (45,60% este año respecto a un 73% de ocupación en 2019) mientras que en Blau Verd Hotels el bajón fue menor con un 12,45% (contando un 37,14%1,9).

A partir del mes de julio se abrió un período de flexibilización de las medidas restrictivas, lo que permitió una pequeña mejora de los niveles de empleo. En Costa Brava Hotels el descenso respecto a 2019 fue del 19,44% (86,52% el año pasado y 67,08% este 2020). En el caso de Blau Verd Hotels, el descenso respecto a 2019 ha sido del 9,19% (la ocupación del año pasado fue del 53,31% y la de este año es del 48,12%).

Por último, durante el mes de agosto, se ha detectado un claro incremento del empleo respecto a los meses anteriores. En comparación con el 2019, los datos siguen siendo negativos -especialmente en los hoteles del litoral- pero en menor medida, ya que la marca Costa Brava Hotels ha obtenido un 76,92% de ocupación que significa un descenso del 16,49% respecto al año pasado, donde los datos de ocupación fueron espectaculares con un 93. En Azul Verde Hoteles el descenso es prácticamente inexistente con una disminución de los niveles de ocupación del 1,56% (la ocupación en 2019 fue del 74,29% mientras que este año ha sido del 72,73%).

Oferta turística variada y de calidad

Como se ha comentado anteriormente, el turismo de proximidad ha tenido una clara incidencia en el desarrollo de la temporada de este verano atípico. Las circunstancias han provocado que el turista que habitualmente se marchaba al extranjero, este año haya disfrutado de los encantos de un destino atractivo como Cataluña.

Evidentemente, la magnífica oferta turística existente en nuestro país también explica  el aumento exponencial del turismo catalán y de lo que proviene de otros puntos del Estado. Las personas que este verano se han alojado en cualquiera de los establecimientos de la marca Costa Brava Verd Hotels han tenido la oportunidad de redescubrir lugares –o disfrutarlos por primera vez- que son envidiados en todo el mundo.

Aparte de encontrarse muy cerca de las playas y calas más bonitas de nuestro país y de pueblos medievales con encanto, los 28 alojamientos de Costa Brava Hotels ofrecen un abanico muy amplio de actividades relacionadas con la gastronomía, el senderismo, el cicloturismo, el enoturismo, la salud y el wellness.

La proximidad entre el litoral gerundense y los Pirineos ha permitido que muchos visitantes también hayan optado por los destinos de montaña. En este sentido, los 14 establecimientos de Blau Verd Hotels disponen de una oferta turística envidiable. Cualquier momento es bueno para hacer una escapada y disfrutar de los magníficos paisajes de los Pirineos de Girona (Garrotxa, Ripollès y Cerdanya) y de las comarcas de interior (Alt Empordà, Gironès y Pla de l'Estany).

Tanto en el caso de Costa Brava Hotels como de Blau Verd Hotels, los establecimientos también proponen escapadas de turismo activo.